Diario de Cádiz, día 3: caballos, tapeo por Jerez y Bodegas Urium

MARTES 10/10/2017

Hoy teníamos el espectáculo de la REAL ESCUELA ANDALUZA DE ARTE ECUESTRE a las 12, cuyas entradas nos imprimió nuestra atenta y amable vecina Isabel, y nos las echó por debajo de la puerta de nuestro apartamento el día anterior. Pinchad aquí si queréis comprar entradas online en la web de la Escuela.

Real Escuela Andaluza

Fuimos con tiempo, dado que el aforo es de 1000 personas y la Escuela no dispone de aparcamiento propio para visitantes. No tuvimos mucho problema para encontrar sitio en los alrededores, pues gran cantidad de los asistentes venían en buses de excursiones organizadas que sólo paraban en la puerta a descargar al personal.

Carro de caballos

Real Escuela Ecuestre

El espectáculo duró alrededor de una hora y media, con un descanso de 10 minutos. Es muy bonito pero no se pueden sacar fotos ni vídeos, de hecho a mí me riñó una de las azafatas cuando saqué el móvil, y es que están bastante pendientes. Disfrutamos de los carros, saltos, jinetes a caballo, etc. Al salir dimos una vuelta por el recinto, en donde se puede ver la zona de calentamiento, la guarnicionería, museo, jardines, etc. Los amantes de los caballos gozarán en este lugar, pero los demás también, os recomiendo la actividad por única.

REal Escuela Ecuestre

Guarnicionería

Al salir subimos de nuevo a nuestro coche para volver al piso y dejarlo allí aparcado. Salimos nuevamente a la calle, esta vez a pie, para buscar un sitio donde comer. Hicimos la primera parada en la ABACERÍA CRUZ VIEJA, en donde pedimos un Albondigón con salsa de almendras, Menudos, Tortillona, Carne mechada y cuatro cañas, pagando 20’6€.

Jerez

Otro sitio del que habíamos leído buenas críticas era LA MODERNA así que para este local nos dirigimos después. Una vez allí pedimos dos Montaditos de lomo al oloroso, Papas aliñás y Cazón en adobo, dos finos, dos cañas y un agua con gas, pagando 13’3€.

La Moderna

A las 17:30 teníamos cita para visitar BODEGAS URIUM así que después de comer nos acercamos a la misma dando un paseo y, como aún era pronto, tomamos un café por el barrio. A la hora acordada llamamos al portón, abriéndonos Rocío, Enóloga y Directora Técnica de la bodega, y Mario, su marido. Ella y su padre, Alonso Ruiz, son el alma de la bodega. Se unieron a la visita otras dos parejas más de asturianos muy simpáticos.

Bodegas Urium

Urium, que se encuentra en el centro de Jerez, es una de las bodegas más pequeñas del marco; cuenta con una estructura típica de techos altos de madera, patio central y suelo de albero. Por lo que nos explicó Rocío su familia proviene de Moguer (Huelva), pueblo natal de Juan Ramón Jiménez. El origen del nombre de la bodega es Mons Urium, que es como se llamaba a esta localidad durante la época romana.

Alonso y Rocío

Alonso, que llegó un poco después, nos contó que su padre volvió herido de la Guerra Civil y entonces su progenitor (abuelo de Alonso) le compró una bota de vino con el fin de abrir un tabanco y tener así un medio de vida; ahí empezó la relación de la familia con el mundo del vino. A Alonso le interesaba el vino de Jerez así que buscó una bodega en el marco hasta que encontró lo que quería, botas con vinos de gran calidad.

La propiedad que visitamos fue finalmente adquirida hace diez años, botas incluidas, entre las que había verdaderas joyas (algunas fueron datadas mediante carbono 14 como de más de cien años). Tras una selección inicial de barricas, en la que descartaron las que no se ajustaban a sus requisitos, cuentan actualmente con unas 500, lo que para Jerez es una bodega pequeña. Por lo tanto se trata de una joven marca que, sin embargo, ofrece producto de alta calidad y gran antigüedad. Además Rocío y Alonso han sabido incluir con el tiempo su huella, carácter y saber hacer, tras unos difíciles comienzos debido a la crisis económica. Por ejemplo han sido los primeros en sacar al mercado vino en botella de cristal transparente, una novedad en la zona.

No producen uva, la adquieren desde hace muchos años a Curro, un viticultor que posee fincas en Pago Balbaína. Poco a poco se han dado a conocer y sus vinos ya figuran entre los mejores del marco, siendo servidos en numerosos eventos, concursos, etc. Un dato curioso que nos comentó Alonso fue el lanzamiento de un vino muy exclusivo, Palo Cortado Gran Señor de Urium, que actualmente cuesta la friolera de 36.000€, y aquí os dejo el enlace para que veáis que es cierto.

Elaboran tres líneas: Urium Clásicos, Crianza biológica y VORS, pero con pocas sacas al año, dada la cantidad y calidad del producto (y siempre en rama). Rocío venenció varios de ellos para que los probásemos:

-Fino Urium Urium Clásico: con una crianza biológica media de ocho años.

-Amontillado: con 8 años de crianza biológica para luego pasar a oxidativa durante otros siete años, sumando por tanto un total de 15 años; su solera se rocía con el fino.

-Oloroso Urium Clásico: cuenta con alrededor de 12 años de crianza oxidativa.

-Palo cortado: 18 años de oxidativa.

-Palo Cortado VORS: con al menos 40 años de antigüedad.

-Cream: se trata de una mezcla de oloroso con 20% de Pedro Ximenez que potencia al primero pero también aporta aromas. El PX procede de viejísimas soleras que estaban en la bodega y otras que fueron adquiriendo en el marco. Para rociarlo utilizan PX de la zona de Jerez.

-Pedro Ximenez VORS: con más de 40 años de antigüedad, el único que probamos de botella.

Hay que aclarar que todos los VORS de la bodega cuentan con la máxima calificación pero en este caso superan los 40 años. Estuvimos en la bodega hasta las 21, pues sus anfitriones nos hicieron sentir como en casa, cantando, bebiendo, charlando, etc., guardaremos para siempre un gran recuerdo de ese día. Además sus vinos nos parecieron de lo mejor que hemos probado del marcos. Tengo que avisar que la bodega es muy pequeña y no está acondicionada para recibir visitas por lo que tendréis que llamar antes si queréis verla.

Poseen una bodega en Sanlúcar, sita en la Calle Padre de Aldama, con 50 botas de manzanilla. Están recuperando el casco y en él están iniciando un proyecto de oferta enoturística.

En cuanto a Rocío, es economista y MBA, trabajaba de auditora en una empresa de construcción. Montó además un negocio de moda y empezó a combinarlo con la bodega. Hace unos años abandonó el negocio para centrarse en URIUM. Si queréis comprar botellas de la bodega podéis escribir al correo rocioruiz@urium.es, donde os informarán de precios y posibilidad de distribución en cada zona.

Al salir tomamos algo en un local cercano llamado TABANCO LA PANDILLA: Queso viejo y Mojama, dos finos y dos cañas, pagando 14€.

Tabanco La Pandilla

Caminamos a continuación hacia el centro y en el primer local en el que vimos mucha gente nos sentamos. Se llamaba LA TAPERÍA y disponía de terraza, en donde nos sentamos, y pedimos  lo siguiente:

-Huevos fritos con jamón

-Brochetas  moruna y de Solomillo

La Tapería Jerez

Para beber fueron tres cañas, un fino y dos aguas, pagando 44’70€. Estaba todo muy bueno y el servicio fue amable, de hecho nos invitaron a unos chupitos de hierbas al final.

La Tapería

Tras la cena y la charla volvimos al piso, en donde disfrutamos un rato de la terraza, pues por la noche hacía una temperatura estupenda.

Vista nocturna desde la terraza

 

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